¿Te gusta consumir energía?

Hay personas a las que le gusta pasear, personas a las que les gusta cocinar o comer, pintar, leer, escribir, ir de compras o hasta conducir…, y lo hacen cuando pueden o las circunstancias lo permiten.

Pero, ¿conoces a alguien que le guste consumir… energía?

Nosotros no conocemos a nadie que confiese disfrutar con el consumo energético y, sin embargo, lo hacemos todo el tiempo: consumimos energía constantemente y en gran cantidad, incluso cuando nos ausentamos de casa o cuando dormimos el contador sigue hacía sumando.

La energía la pagamos, claro, porque es de todo menos gratis: la pagas tú con tu dinero, cada mes; y lo paga el medioambiente con sus recursos y su agotamiento.

Saber más, para gastar menos

La nevera, que está todo el tiempo enchufada y funcionando, es uno de los electrodomésticos que más gastan. Para rebajar el consumo energético, no dejes la puerta abierta y no guardes en su interior alimentos o recipientes calientes. Al margen de esto (que ya es mucho), es muy aconsejable contar con una nevera ecológica, porque bajarás mucho el consumo (y, a medio plazo, ahorrarás un buen dinero).

La lavadora también es responsable de una parte considerable de la energía que se gasta en casa. Elige programas más cortos, rebaja la temperatura del agua o lava en frío, y úsala solo cuando la puedas llenar: las medias cargas solo sirven para usar dos veces la lavadora, gastar más electricidad y más agua.

Con la vitrocerámica o cocina eléctrica, recuerda simplemente que puedes tapar las ollas o las sartenes para que el calor no se diluya y, por tanto, para hacer menos gasto energético.

Y si hablamos del horno, que también gasta lo suyo, si quieres ahorrar un poquito, no lo abras constantemente cuando esté en funcionamiento (pierdes un 20% de calor cada vez que lo haces) y no se te ocurra utilizarlo solo para descongelar una barrita de pan, porque estarás matando moscas a cañonazos.

Como las luces de una habitación, hay que apagar completamente el televisor siempre que no se esté usando, especialmente en esas casas en las que hay una tele en la cocina, una tele en el comedor, una en el dormitorio de los niñ@s y una en el de los papis/las mamis…

¿Cuatro televisores?

Pues sí, ¡y hay momentos en que todos ellos pueden estar funcionando al mismo tiempo!

El vampiro: de noche, cuando duermes, también te consume… la energía

Pero de todos los electrodomésticos de una casa, el que más gasta y menos provecho proporciona es un gran desconocido al que algunos expertos denominan “el vampiro”, porque es justamente de noche, mientras dormimos, cuando más placer siente clavando sus colmillos en el cuello (y el bolsillo) de los consumidores.

Pero de eso, de vampiros energéticos, hablaremos el próximo post.